Hace años que convivimos con anuncios todo el tiempo en nuestras pantallas, y en un momento esos anuncios llegaron a las redes sociales para mezclarse en las publicaciones como Altaïr entre los monjes.
Anuncios en el feed, anuncios en la lupita, anuncios entre stories, se calcula que más del 20% del contenido que vemos en Instagram es publicidad, según la empresa de marketing digital WhistleOut.
¿Estaría esto a punto de llegar a su fin? Según lo publicado en el New York Times, Meta está analizando la posibilidad de ofrecer Facebook e Instagram sin publicidad a cambio de una suscripción, algo muy parecido a lo que hace Youtube, por ejemplo. Igualmente, este servicio estaría pensado solo para la Union Europea, donde las constantes regulaciones complicaron los negocios de la empresa de Marquitos Zuckerberg.
La gran mayoría de los ingresos de Meta provienen de la publicidad, la cual está muy bien direccionada gracias a que usa varios sistemas para analizar datos y comportamientos y así crear perfiles de consumo de los usuarios. Pero a la UE no le gusta esto, y por eso comenzó a limitar las maneras en las que estos datos son recopilados y utilizados. Europa representa un 10% de los ingresos de Meta, por lo que estas restricciones no estarían siendo muy favorables.
Por ejemplo, el año que viene pondrán en marcha la Ley de Mercados Digitales, cuya aprobación ha retrasado los planes de lanzar Threads en Europa.
Todo esto hizo que Meta considere finalmente un modelo de suscripción para poder usar Instagram y Facebook sin anuncios. Por supuesto las versiones gratuitas seguirán existiendo pero al ser la publicidad menos efectiva, no serán tan rentables.
El tema es, ¿cuánto podría costar? En promedio cada usuario de la Unión Europea genera unos 17 euros trimestrales, por lo que si quieren compensar la pérdida, cada suscripción debería rondar unos 5 o 6 euros al mes.